“Esta semana, la periodista de EL PAÍS Andrea Aguilar le preguntaba a Salman Rushdie si el terrible ataque que sufrió en 2022 ha cambiado su manera de mirar el mundo. Responde el escritor: “Lo que ocurre en el mundo es lo que cambia mi manera de mirarlo. Hoy atravesamos un momento terrible”. Una respuesta que condensa la inteligencia y la ausencia total de fanatismo de las que hace gala en su libro Cuchillo y que han sido evidentes en todas sus intervenciones durante su estancia española. A lo que hay que sumar un sentido del humor que protege contra la arrogancia intelectual, la obsesión o la amargura. No es poco bagaje cuando una fatua del ayatolá Jomeini te ha condenado a vivir temiendo un atentado y cuando 30 años después la amenaza se materializa en un ataque que casi te cuesta la vida y te deja lesiones permanentes. Quizás su mayor venganza contra los que decretaron su muerte sea esa presencia plena, dichosa, lúcida y bienhumorada con la que se pasea por el mundo. Tiene toda la razón Javier Cercas cuando dice “proteger a Salman Rushdie es proteger la civilización”.
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